¡Feliz Mes de Orgullo LGBTQIA+! Cada mes de junio, los arco iris abundan en el condado de Sonoma, declarando públicamente el orgullo de formar parte de la comunidad Queer, el orgullo de ser aliados, y celebrando y elevando con orgullo las voces LGBTQIA+. En Generation Housing, nos dedicamos a abogar por más viviendas, más diversas y más asequibles, y como lo hacemos con un compromiso con la equidad, prestamos mucha atención a los impactos de nuestro sistema de vivienda en las poblaciones tradicionalmente marginadas, como la comunidad Queer. Así pues, mientras levantamos la bandera del orgullo y la celebración de los progresos realizados, también mantenemos una visión clara de los continuos retos en materia de vivienda a los que se enfrenta la comunidad Queer, el impacto de esos retos y el compromiso de abordarlos.
Hace muy poco, en 2021, el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano de EE.UU. (HUD) concedió protección federal contra la discriminación en materia de vivienda a las personas LGBTQ en virtud de la Ley de Vivienda Justa. A pesar de estos avances, numerosos estudios siguen revelando importantes prejuicios contra los estadounidenses LGBTQIA+ en su búsqueda de vivienda.
Se trata de una respuesta tardía, pero bienvenida, a los retos conocidos que afrontan los LGBTQIA+ en todo el país. Los estudios han demostrado que las personas LGBTQIA+ tienen más probabilidades de experimentar inestabilidad en la vivienda y falta de hogar en comparación con sus homólogos cisgénero y heterosexuales. Un estudio del HUD descubrió que los proveedores de vivienda de varias ciudades estadounidenses discriminaban a los hombres homosexuales y transexuales al informarles de que había menos unidades disponibles que a los hombres heterosexuales y a las personas cisgénero. Otro estudio concluyó que aproximadamente el 40% de los jóvenes sin hogar se identifican como LGBTQIA+.
Lamentablemente, la información demográfica sobre la identidad de género y la orientación sexual se eliminó del Censo de 2020 debido a la controversia política, lo que limita nuestra capacidad para comprender y abordar plenamente estas disparidades. En Generation Housing, reconocemos la importancia crítica de recopilar estos datos para desarrollar políticas e intervenciones específicas que reduzcan la inestabilidad de la vivienda y promuevan el bienestar general de las personas LGBTQIA+. Por eso, cuando nos embarcamos en nuestro estudio sobre las repercusiones de la carga del coste de la vivienda a nivel local, recogimos específicamente datos demográficos sobre la identidad de género y la orientación sexual y trabajamos duro para asegurarnos de que contábamos con una muestra estadísticamente representativa de encuestados que se identificaban de forma distinta al género cis y/o heterosexual.
Algunas de las conclusiones clave relevantes para nuestra comunidad local LGBTQIA+ en nuestro informe, Making the Rent: the Human Price of Housing Cost Burden, incluyen los siguientes impactos de la carga del coste de la vivienda:
- Los encuestados no binarios declararon tener tasas sustancialmente más altas de dificultad para costearse los servicios sanitarios esenciales en comparación con los que se identificaban como hombres o mujeres.
- Los encuestados homosexuales tienen el doble de probabilidades que los no homosexuales de tener dificultades para costearse los servicios de salud mental.
- Los encuestados no binarios corren un riesgo considerablemente mayor de no poder permitirse cubrir necesidades básicas como medicamentos con receta, medicamentos sin receta, ropa, servicios públicos, etc.
- En general, los encuestados queer se enfrentan a un mayor reto a la hora de costearse las necesidades básicas en comparación con los encuestados no queer.
Los alarmantes datos recogidos tanto a nivel nacional como local ponen de manifiesto la urgente necesidad de soluciones integrales para abordar las disparidades en materia de vivienda a las que se enfrenta la comunidad LGBTQIA+/Queer en todo el país.
Mientras trabajamos por un futuro más equitativo, debemos seguir abogando por políticas de vivienda integrales que aborden las necesidades y los retos específicos a los que se enfrenta la comunidad LGBTQIA+. Hacerlo requiere una fuerte alianza. Juntos, luchemos por un futuro mejor en el que todos, independientemente de su identidad de género u orientación sexual, puedan encontrar una vivienda segura, asequible e inclusiva. Todos somos Gen H.
Con orgullo y en unidad,
El Equipo Gen H