Nuestro más profundo agradecimiento a las personas que han apoyado nuestro trabajo para catalizar soluciones de vivienda en el Norte de la Bahía y a quienes han demostrado un gran liderazgo para impulsarnos hacia soluciones de vivienda. Son demasiados para darles las gracias por su nombre -y no queremos pasar por alto a nadie-, así que si se ven reflejados en este mensaje, probablemente estén en lo cierto.
Estamos agradecidos a los financiadores que están dispuestos a jugar a largo plazo e invertir en soluciones y en el cambio de los sistemas en lugar de limitarse a la gestión y mitigación de los problemas.
Estamos agradecidos a nuestros miembros de #SomosGenH que ayudan a informar nuestro trabajo, amplificar nuestros esfuerzos y asegurar que somos financieramente sostenibles.
Estamos agradecidos a los miembros de nuestro equipo de acción, que defienden la vivienda a través de peticiones y comentarios públicos, y cartas de alianza.
Estamos agradecidos a nuestro Consejo Asesor, al Comité Asesor de Políticas, al Comité de Miembros y a los Conectores Comunitarios, así como a los miembros no oficiales del grupo de expertos que acuden a las reuniones, por teléfono, por mensaje de texto o a través de un IPA local ocasional para garantizar que nuestro trabajo esté impulsado por la experiencia en la materia y por perspectivas diversas.
Hace poco me señalaron que, con respecto al trabajo político de Generation Housing -que creemos que es la clave para el verdadero cambio de los sistemas de vivienda necesario para una comunidad próspera, equitativa y sostenible-, lo difícil es que en Generation Housing queremos que se hagan las cosas, pero no somos los que las hacen. Huh. Buena observación.
Por eso, en esta época de gratitud, queremos dar las gracias especialmente a los políticos responsables:
Gracias a todos los que asumen funciones de liderazgo para representar al público -bajo los focos- y hacen todo lo posible para mover los lentos cambios y girar los grandes timones de los gigantescos barcos burocráticos, especialmente con prioridades contrapuestas, presupuestos ajustados y el reto de equilibrar los objetivos a corto plazo frente a los objetivos a largo plazo.
Estamos agradecidos a todos los líderes que se han resistido al provincialismo y a la insularidad organizativa y se han inclinado por soluciones colaborativas y regionales.
Nuestro más profundo agradecimiento a los líderes electos y al personal jurisdiccional que han estado dispuestos a ser los primeros y a intentar algo nuevo, y a los que no han dejado que el miedo, la complejidad o la perfección sean excusas para la inacción o el retraso. Su valentía es inspiradora, contagiosa y más necesaria que nunca.